La experiencia nos demuestra que las empresas no son plenamente conscientes de las posibilidades que les ofrece la legislación fiscal para optimizar y reducir el gasto del Impuesto sobre Sociedades.
Por ello, el asesoramiento integral en este ámbito debe buscar la mejor de las alternativas posibles para reducir la cuota impositiva:
- Revisión de las amortizaciones.
- Correcciones de valor: pérdida por deterioro del valor de los elementos patrimoniales.
- Exenciones fiscales.
- Aplicación de las reducciones en la base imponible: reservas de capitalización, patent-box, etc.
- Deducciones y bonificaciones: I+D+i, creación de empleo, doble imposición, etc.
- Aplicación de regímenes fiscales especiales: consolidación fiscal, entidades parcialmente exentas, PYMEs, etc.